Baile de improvisación por excelencia, sensitivo, intuitivo, el intento de moverse con otro cuerpo implica una cualidad de presencia especial que conecta con el aquí y ahora anclando en el presente. Es un disfrute con un sin fin de matices y variaciones que corresponden a lo que sucede en cada instante, al "como" uno responde a lo que siente, variable, cambiante...